Hoy vamos a hablar de los abogados en las series americanas, y las ideas falsas que han generado en la gente de la calle.
La primera, y más común, es que ganamos mucha pasta, algunos/as sí pero la mayoría ganan para vivir, sin más. Esto también se lo he oído a algún marqués latifundista español, pero en este caso es cierto. Y como he dicho muchas veces hay profesionales de muchas cualidades, como en cualquier sector, y también como en cualquier sector, los que más cobran no son necesariamente los más buenos o buenas.
La segunda es que somos investigadores privados, que conseguimos pruebas para inculpar a quien acusamos o para exculpar a quien defendemos. Eso ni siquiera pasa así en Estados Unidos, es decir, lo que llamamos América, como si Canadá o Brasil no existiera.

Las pruebas tienen que seguir un conducto delimitado por la ley, porque si no, no sirven, no tendrán validez dentro del proceso. Lo que si podemos hacer es participar del trabajo de otros profesionales, podemos estar en una autopsia en un caso de homicidio por ejemplo, o podemos participar, con
limitaciones, en un informe forense-químico, en un caso de drogas, también podremos estar en una inspección ocular del lugar del delito pero no podemos entrar por la ventana de una casa y buscar en el botiquín de quien sea, si tiene medicamentos sospechosos, se nos caería el pelo.
La tercera falsedad muy común es, que no llevamos peluca, siempre me sorprende este comentario, porque eso tampoco pasa en Estados Unidos, eso es propio de algunas instancias judiciales en Gran Bretaña, y no siempre, dependerá del tipo de delitos que se juzguen.
En definitiva, no he visto series, ni siquiera españolas, que se parezcan mínimamente a nuestro trabajo en España, el cual es realmente fascinante pero debe ser poco interesante para la ficción, o la documentación no entra en el presupuesto, mejor invertir en efectos especiales para que un abogado
entre por la ventana de una casa, que no es suya.
Músicas del episodio:
Maarten Schellekens – Lounge-It
Ketsa – Treasure